Un proceso no apto para estómagos delicados

BELINDA CEA (SANKT POLTEN, AUSTRIA) 16/03/2009 05:20

Costó escoger a esas doce personas, custodiadas en lugares secretos de la ciudad, protegidas por la policía, casi tanto como Josef Fritzl. Ocho estarán presentes en el juicio y cuatro son suplentes. En Austria todo el mundo ha oido hablar del monstruo y quien más, quien menos, se ha formado una opinión.

Encontrar a alguien dispuesto a analizar las pruebas en contra de Josef Fritzl no ha sido sencillo. Y más aún conociendo, como la juez Andrea Hummer, el terrible testimonio de la principal víctima, Elizabeth, encerrada y violada por su padre en un zulo durante 24 años.

Por eso, a disposición del jurado hay varios médicos y psicólogos. Una asistencia fundamental para poder soportar con cierta entereza esas 11 horas de acusaciones de Elizabeth. Los detalles de las más de 3.000 violaciones a las que fue sometida se los administrará la juez al jurado por partes. Dos horas diarias de grabaciones. Ni un minuto más.

Elizabeth contará que fue agredida sexualmente desde los once años. Entonces su padre le dejaba revistas pornográficas debajo de la almohada. Dirá que trató de defenderse "dándole patadas y gritando" cuando la encerró en el zulo. Que la encadenó, que parió sola seis veces y que Josef Fritzl disponía de ella como una propiedad hasta tal extremo que cuando ella se resistía, Josef les dejaba sin comida y la tortura se amplificaba cuando les quitaba la luz, sumidos en una oscuridad total, rodeados de ratas.

Por eso Elizabeth, asegura, se sintió aliviada cuando murió uno de sus hijos. "Estará en un lugar mejor" dejó escrito en unos diarios que son pruebas fundamentales de la acusación y de la fiscalía y que les han servido a los investigadores para realizar una cronología precisa del calvario de la jóven y sus hijos.

Varios juristas austríacos señalan que será difícil probar el cargo de homicidio. Así Fritzl podría ser condenado a sólo 15 años de cárcel, la pena máxima por encierro y violación. Una condena que podría verse reducida a la mitad por buen comportamiento. Siete años y medio que sumado al año que lleva en prisión le pondría en la calle a punto de cumplir los 80. La fiscalía ha solicitado que, al margen de la pena que se dicte, Fritzl sea internado de por vida en una clínica psiquiátrica. Josef Fritzl ha dicho que asume que acabará sus días encerrado. ¿Ustedes qué opinan?