Retiran la obligatoriedad de llevar pulseras identificativas para los solicitantes de asilo en Cardiff

EUROPA PRESS 25/01/2016 14:52

"Estamos revisando constantemente la forma en la que suministramos nuestros servicios y hemos decidido interrumpir el uso de pulseras a partir del lunes 25 de enero y buscar una forma alternativa para gestionar la justa distribución de ayuda", ha informado la empresa contratista del Ministerio del Interior, Clearsprings Ready Homes, según recoge el diario 'The Guardian'.

La polémica surgió el domingo tras la publicación de un reportaje precisamente en 'The Guardian' en el que denunciaba la utilización de estas pulseras, lo que facilitaba los ataques racistas y la discriminación de los solicitantes de asilo.

Los solicitantes de asilo no pueden trabajar ni solicitar ayudas sociales, pero algunos sí reciben una asignación mensual o una tarjeta Azure para comprar en supermercados. Sin embargo, los recién llegados no tienen ni siquiera estas ayudas del Ministerio del Interior y son alojados en instalaciones parecidas a hoteles en las que se les da tres comidas al día. Para ello, era obligatorio llevar estas pulseras de un color rojo muy llamativo.

"La pulsera es discriminatoria, así de sencillo. Si no hay pulsera, no hay comida. Nos hacían sentir como seres humanos de segunda clase", relatabo el sudanés Mogdad Abdeen, de 24 años, en declaraciones al diario británico.

Todos los que han hablado con 'The Guardian' son antiguos inquilinos de Lynx House, ya que las personas que están alojadas actuales han rechazado hacer declaraciones por miedo a posibles castigos. Solo aceptaron que les fotografiaran sus pulseras.

Desde Clearsprings argumentaban que estas pulseras facilitaban el trabajo de reparto de comidas. Además, destacan que las pulseras no tienen ningún tipo de marca ni inscripción. El sistema se implantó en mayo de 2015 ante el aumento de solicitantes de asilo.

"Los solicitantes de asilo que pasen las primeras semanas en nuestros albergues de Cardiff reciben pulseras desde mayo de 2015 para garantizar que reciben los servicios a los que tienen derecho", explicaban este lunes desde la empresa en el comunicado que anuncia el fin de esta práctica. "Las pulseras están consideradas como una de las fórmulas más eficaces para garantizar" que reciben la comida, insistían. La empresa lleva 15 años prestando servicios al Ministerio del Interior británico.

A nivel político, la diputada laborista por Cardiff Jo Stevens, quien es además ministra de Justicia en la sombra, ha expresado su satisfacción por la retirada de las pulseras. Poco antes había manifestado su "seria preocupación" por este hecho.

"Sin embargo, quedan pendientes preguntas importantes que voy a plantear al Ministerio del Interior para saber cómo se permitió esta práctica y si existe en otras instalaciones de acogida temporal del Ministerio del Interior", ha declarado.