Estados Unidos y Corea del Sur han comenzado sus prácticas militares conjuntas anuales, que se extenderán por espacio de diez días, y que el comandante estadounidense al cargo ha tildado de "defensivas".
Los ejercicios de los Guardianes de la Libertad Ulchi involucran a cerca de 530.000 tropas de Corea del Sur, Estados Unidos y otros siete países, así como simulaciones por ordenador, según ha informado la cadena de televisión estadounidense CNN.
Estas prácticas militares llegan en un momento de tensión entre ambas Coreas. La semana pasada el Sur disparó contra el Norte tras denunciar un ataque de Pyongyang cerca de la frontera marítima entre ambos países, algo que el régimen norcoreano desmintió.
Corea del Norte reivindica el Sur como parte de su territorio, puesto que, a su entender, la actual frontera fue delimitada unilateralmente por Estados Unidos después de la guerra (1950-1953). Corea de Sur, en cambio, asegura que el Norte ya reconoció la frontera en un acuerdo de 1992.
Las tensiones entre los dos países vecinos se habían reducido desde principios de este año cuando Corea del Norte mostró su disposición a dialogar con Corea del Sur y retomar las conversaciones a seis bandas, destinadas a poner fin al programa de armamento nuclear de Pyongyang.