"Nunca, jamás comprometeremos la integridad territorial de India, de la que Jammu y Cachemira son parte", declaró Singh en respuesta a los comentarios formulados por el primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif, en los que exigía una resolución del histórico conflicto siguiendo las líneas generales pactadas por el Consejo de Seguridad de la ONU, y que en teoría contaban con la buena disposición del Gobierno indio.
Además, Singh declaró que el terrorismo sigue planteando una grave amenaza a la estabilidad y que cada día se cobra numerosas vidas inocentes en todo el mundo. En este sentido, el primer ministro indio declaró a Pakistán "epicentro del terrorismo en la región" y ejemplo de "terrorismo interfronterizo bajo patrocinio estatal, que representa una preocupación particular en India".
El primer ministro relacionó ambos temas puntualizando que India solo discutirá la situación Jammu y Cachemira cuando se demuestre que "el territorio de Pakistán y las zonas bajo su control no son empleadas para proporcionar apoyo y financiación a grupos terroristas que tienen a India como objetivo", según el discurso recogido por la cadena india NDTV.
"También es importante que Pakistán apague la maquinaria terrorista que obtiene su sustento en ese país", añadió Singh, que decidió acudir a la Asamblea General en el último momento después de que los últimos ataques en Jammu, donde un soldado indio fue decapitado el pasado mes de enero en un ataque en la Línea de Control que separa ambos países, y otros cinco militares fallecieron por disparos de soldados paquistaníes el mes pasado.