"Me agarré a las rocas y sentía cómo el tiburón tiraba de mí", contó el bañista, que fue auxiliado por su mujer cuando logró salir del agua.
El tiburón blanco medía dos metros de largo, según el testimonio de agredido, aunque la policía identificó más tarde un fragmento de diente y aseguró que era un 'wobbegong', una especie considerada dócil.
Otro funcionario explicó que el tiburón quizá se asustó o tal vez fue el bañista, porque no se conocen ataques a seres humanos por parte de esta especie, que no es agresiva.
Este ataque coincide con otro sufrido recientemente por Michael Brown, subdirector de asistencia a los surfistas en Australia.
Estaba nadando con su hijo adolescente cuando fue atacado por un tiburón blanco y también tuvo mucha suerte que se encontraban cerca de un arrecife donde consiguieron refugiarse.
Brown aprovechó para pedir que el Gobierno se implique más y de más recursos para las patrullas antitiburones de las playas australianas.