"El 25 de enero, Israel decidió declarar tierra estatal 154 hectáreas de terrenos cera de Jericó, en Cisjordania" y se ha aprobado la construcción de 150 nuevas viviendas, destaca el Servicio de Acción Exterior de la UE en un comunicado.
Días después, fueron demolidas varias estructuras palestinas al sur de Hebrón. "Es especialmente preocupante tanto por la escala de las demoliciones como por el número de individuos vulnerables afectados, incluidos menores", denuncia la UE.
Entre estas estructuras demolidas había edificios construidos con ayuda de la UE. Estas instalaciones se construyeron "con el único fin de proporcionar apoyo humanitario a los más vulnerables". "Pedimos a las autoridades israelíes que den marcha atrás a estas decisiones y que no haya más demoliciones", añade el texto.