Los jefes de Estado y de Gobierno de la UE han reclamado viernes a la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, que les presente una nueva estrategia global de la UE sobre Política Exterior y de Seguridad "a más tardar" en la cumbre de junio de 2016 ante el cambio "radical" en el entorno de la seguridad en Europa, en alusión a las amenazas en el este por el conflicto en Ucrania y de los grupos terroristas y la presión migratoria en el sur.
"En el contexto de los crecientes desafíos de seguridad, los líderes han acordado preparar una nueva estrategia sobre Política Exterior y de Seguridad y la alta representante la presentará al Consejo Europeo el próximo junio", ha confirmado el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, en rueda de prensa al término de la cumbre.
Los líderes también han reclamado avanzar en la nueva Estrategia de Seguridad Interna de la UE y "la plena aplicación" de las orientaciones para combatir el terrorismo acordadas en febrero de 2015 tras los atentados contra el semanario satírico 'Charlie Hebdo', que sigue siendo "una prioridad", según el texto de conclusiones de la cumbre, que ha estado marcada este viernes por los triples atentados terroristas en Francia, Túnez y Kuwait.
Según ha explicado Tusk, los líderes han abordado "las nuevas amenazas en Europa" como "la guerra híbrida, el terrorismo global y los ciberataques" con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg. El noruego les ha trasladado la necesidad de "estabilizar" el vecindario al este y sur y ha avisado de que la seguridad "no es gratis" y los países europeos "necesitan gastar más en defensa", han explicado fuentes aliadas.
"Los europeos deben invertir en su propia defensa para hacer frente al entorno de seguridad que ha cambiado radicalmente. Hemos acordado que los fondos de la UE deben movilizarse para ayudar a fortalecer la industria de la defensa en Europa, incluido en investigación y tecnología", ha explicado Tusk.
PIDEN DESTINAR GASTO SUFICIENTE A DEFENSA Y FONDOS DE LA UE
En el texto de conclusiones adoptado, los jefes de Estado y de Gobierno han admitido necesidad de destinar un nivel de gasto "suficiente" a defensa y "hacer el máximo uso eficiente de los recursos" y han pedido que el presupuesto europeo garantice "una financiación adecuada" para las actividades de preparación de investigaciones relacionadas con la Política de Seguridad y Defensa Común "que sienten las bases para un posible programa futuro de investigación y tecnología de defensa" con presupuesto europeo.
La acción, acordada por los líderes en la cumbre de diciembre de 2013 y que la Comisión espera lanzar en 2017, contará con un presupuesto de apenas 50 millones pero se espera que allane el camino para poner en marcha un programa de investigación comunitario a partir de 2020 para potenciar las tecnologías de uso dual, civil y militar y que supondría un avance destacable.
Los líderes también han defendido "promover una cooperación europea más intensa y más sistemática" en defensa para materializar "las capacidades esenciales", incluido "mediante fondos de la UE", pero han evitado comprometerse en el desarrollo de nuevas capacidades después de que en la cumbre de 2013 respaldaron los programas de reabastecimiento en vuelo, los aviones no tripulados a distancia o drones, la ciberdefensa y la comunicación por satélites, que lidera España.
MOVILIZARSE CONTRA LA GUERRA HÍBRIDA Y CAPACITAR A TERCEROS
También han reclamado "movilizar los instrumentos de la UE para ayudar a la lucha contra las amenazas híbridas", "intensificar" la cooperación con la OTAN, la ONU, la OSCE y la Unión Africana y "capacitar" a los socios de terceros países "para que puedan prevenir y gestionar crisis", incluido a través "proyectos concretos de creación de capacidades" pero no han detallado fuentes de financiación para ello.
Los líderes han confirmado que "regularmente" abordarán la Política de Seguridad y Defensa Común y que continuará el trabajo para hacer que ésta sea "más eficaz, con mayor proyección pública y más orientada a los resultados", desarrollar las capacidades civiles y militares y el refuerzo de la industria de defensa europea, incluido las pymes, las tres áreas en las que acordaron avanzar en la cumbre de diciembre de 2013.
No obstante, han evitado dar nuevos pasos significativos para avanzar en la integración de la defensa europea y ni si quiera han discutido la propuesta del presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, de crear un Ejército europeo, según han confirmado fuentes europeas. "Siempre me he abstenido de hacer propuestas ambiciosas en defensa", ha ironizado el luxemburgués al término de la reunión.