María, dependienta actualmente en paro, ha demostrado estar muy orgullosa de sí misma: "No hace falta utilizar una talla 36 para sentirse guapa. Tengo una 44 y me siento muy bien", explicaba la joven ganadora al término del evento.
Al igual que Amaya Tovar, Miss Talla Grande Euskadi del pasado año, María Blanco es una chica alegre, optimista, muy segura de sí misma y con las ideas claras, algo que ha demostrado a lo largo de los desfiles, primero en ropa de sport, y después, en ropa de noche, de que ha estado compuesto el concurso.
En un intento de crear una auténtica festividad bilbaína, los organizadores de la competición entrevistaron a todas las candidatas, para, más adelante, hacerlas desfilar con distintos vestidos de su firma. Toda una fiesta de belleza y glamour.
La marca de ropa "Affinity" proporciona los diseños que lucen las participantes durante el acto y a la ganadora de la competición le da la oportunidad de ser imagen, durante un año, para esta firma, que fabrica unos modelos adecuados para todas aquellas que deseen vestir a la moda, sin que el peso se convierta en un obstáculo.