El presidente de la FIA se dice confiado en que prosperará el límite de 45 millones de euros

AGENCIA EFE 02/05/2009 11:50

En declaraciones al diario "Financial Times", Mosley afirma que "hay muy poco margen de negociación" y añade: "El mensaje que me llega de los consejos de dos o tres de los fabricantes es que si logra que el cheque que tengan que firmar no supere los 25 millones de euros, puedo considerarlo un acuerdo más bien permanente".

En los últimos años, los equipos de Fórmula Uno apoyados por fabricantes del sector como Honda, BMW, Toyota, Mercedes y Renault, han protagonizado una carrera presupuestaria para lograr ventajas competitivas en la pista, pero, según Mosley, esto está cambiando con la crisis económica.

"Tenemos contactos con los consejos (de dirección) por vías distintas de los equipos. Los equipos presentan una información interesada a los consejos. El director ejecutivo no tiene tiempo, conocimiento o experiencia para cuestionarla. Pero ahora, como hay falta de dinero, no resulta aceptable despilfarrar millones en la Fórmula Uno", explica.

Según Mosley, el límite presupuestario, que sólo afecta al desarrollo de los coches, puede hacer que vaya más dinero a los bolsillos de los pilotos aunque, según Mosley, el bólido es "tal vez más importante que el piloto" y si los equipos tienen más libertad técnica, "tal vez no sea vital el piloto".

Aunque el tope se ha introducido en un momento de crisis en la industria del motor y de crisis financiera, Mosley insiste en que no será una medida temporal.

"Hay cierto margen de debate, podría subir o bajar en el 2011 y si la economía se recupera, pongamos, en el 2014, podría elevarse. Podría ajustarse ese límite en interés del deporte, pero todos tienen que competir en igualdad de condiciones", explica.

"La crisis crediticia aún no ha golpeado aún realmente a la Fórmula uno. Hemos perdido a Honda, pero la crisis de verdad vendrá cuando se renueven los actuales contratos (de patrocinio)", señala.

"Por el momento están IGN, RBS, Allianz, grandes patrocinadores, pero no estarían este año si no estuviesen vinculados por un contrato", agrega Mosley, quien recuerda que esos contratos se firmaron antes de que las acciones de esos grupos sufrieran fuertes caídas en bolsa.

Una de las principales objeciones de Ferrari al tope fijado es que la FIA no podrá velar por su cumplimiento con su equipo de contables, por lo que, según la escudería italiana, será fácil burlarlo.

En sus declaraciones al FT, Mosley reconoce que el tope puede que no sea perfecto y que habrá "zonas grises", pero asegura que la FIA hará una mejor labor de vigilancia que Hacienda a la hora de buscar a quienes evaden el pago de impuestos.

"Hacienda no puede colocar a un inspector fiscal en cada empresa de modo permanente. Nosotros podemos colocar a varios. Las dificultades y el peligro que entrañaría el hecho de engañar serían enormes. A la menor sospecha de fraude, enviaríamos a un equipo a investigar. Es parte del acuerdo", afirma.