El Senado pide medidas que frenen la fuga fiscal en el sector editorial

EUROPA PRESS 07/10/2015 17:29

La Comisión de Cultura del Senado ha pedido imponer medidas que "frenen la fuga fiscal" en el sector editorial y que "garanticen la leal competencia en un mercado internacionalizado con tendencias monopolistas y de posiciones de dominio en la distribución y venta".

La comisión ha aprobado el informe 'El sector editorial y las nuevas tecnologías', haciendo suyas de esta manera una serie de propuestas de diversos agentes del mundo del libro como representantes de las sociedades de gestión de derechos de autor, periodistas y profesores de derecho mercantil.

Este informe, que será presentado este jueves en la Feria Internacional del Libro Liber, ha sido elaborado a partir de varias comparecencias y será aprobado en el Pleno de la Cámara, instando al Gobierno a seguir las recomendaciones incluidas.

Asimismo, el documento al que ha tenido acceso Europa Press resalta la "conveniencia" de facilitar la renegociación de los contratos preexistentes entre autores, traductores, agentes y editoriales para la explotación digital de los libros.

En concreto, explica que esta renegociación tendría la finalidad de liberar las obras para la explotación digital y, por tanto, "extender el alcance de la cesión de derechos" ante el potencial crecimiento gracias al 'online'.

"La ausencia de barreras geográficas en la edición digital posibilita la orientación de los contenidos hacia un mercado potencial mundial, algo hasta ahora imposible de alcanzar con el libro en papel", señala el texto. No obstante, recuerda que la negociación de derechos ya incluye "con carácter general" cláusulas de explotación universal que se refieren al ámbito geográfico y a la edición y difusión "a través de cualquier tecnología".

El informe resalta además que, en este contexto de ausencia de barreras geográficas, el papel de las traducciones resultará "esencial". "El número de obras españolas traducidas a alguna lengua extranjera ha aumentado estos últimos años", recuerda.

Entre otras conclusiones, el informe también constata que el mercado tradicional en papel "sigue siendo el motor" de la industria, si bien la "notable caída de ventas y la facturación" en los últimos seis años sitúan al mercado del libro digital como "el único que ha crecido y, en consecuencia, el único que crea empleo".

GRANDES VENTAS DE POCOS TÍTULOS

La incorporación de las editoriales, grandes librerías y tiendas 'online' al negocio de los dispositivos de lectura se contempla como un "refuerzo" en la venta de contenidos y en la "creación de ecosistemas digitales", no tanto como "la búsqueda de beneficios directos" por la venta de esta tecnología.

No obstante, alerta de algunos peligros que surgen con la incorporación de las nuevas tecnologías. Entre ellos, la consolidación de un mercado digital "con mucho volumen de títulos", aunque desde la perspectiva de la cifra de negocio "se sostenga por las grandes ventas en torno a pocos títulos".

Además, resalta la "tendencia a la transformación" del hábito de compra de libros, creciendo las transacciones realizadas a través de tiendas online frente a la compra presencial en librerías --que siguen pese a todo como el principal canal de venta de libros--.

"Esta tendencia puede conducir a una distorsión del mercado y de las reglas de competencia, debido a la concentración excesiva de la distribución en pocas empresas globalizadas de gran tamaño con capacidad para imponer precios, en ocasiones por debajo del precio de producción", apunta.

PRECIOS COMPETITIVOS

El informe también destaca que aunque se observe un descenso "relevante" de los precios del libro digital, el lector sigue demandando precios "más competitivos". "El coste de distribución y comercialización de un libro digital no es el de un libro impreso, lo que justificaría un precio inferior", señala.

Asimismo, el documento pone de relieve las "dificultades" ocasionadas por el uso de sistemas tecnológicos destinados a proporcionar "mayor seguridad" en el entorno digital (por ejemplo, los DRM). Por el contrario, alerta sobre el "elevado índice" de consumo no autorizado de libros en el entorno digital, instando a la legislación de propiedad intelectual a "dar una respuesta".

Por otro lado, el documento señala la necesidad de un mismo tratamiento fiscal para el libro en papel y digital, destaca el ensayo de nuevos modelos de negocio como la lectura 'en la nube' o reitera la importancia de los editores como "valor añadido" frente a la autoedición, en un mercado "con tendencia a la sobreproducción".

Por último, el sector considera "conveniente" la adopción de políticas de impulso a la reconversión del sector editorial y la creación de estudios universitarios dirigidos a "fomentar la gestión profesional".