El sindicato británico firma un acuerdo y los españoles verán mañana el nuevo plan Magna

AGENCIA EFE 13/10/2009 07:52

Ante la inminencia de la venta del 55 por ciento de Opel en Europa a Magna y al banco ruso Sberbank, que podría cerrarse mañana, el Congreso aprobaba una iniciativa de apoyo al mantenimiento de la actividad industrial en Figueruelas propuesta por el PSOE para trasladarla al Parlamento Europeo.

El ministro de Industria, Miguel Sebastián, anunció hoy que mañana Magna presentará una nueva oferta a los sindicatos, previsiblemente en la factoría zaragozana, después de que estos abandonaran esta tarde el encuentro celebrado en la sede ministerial, que se extendió durante nueve horas.

Según Sebastián, la propuesta de la firma austríaco-canadiense Magna mejora la anterior -recientemente propuso rebajar en 350 el número de trabajadores sobrantes, cifrado con anterioridad en 1.700- y dijo que será analizada mañana en otra reunión entre todas las partes implicadas.

Sebastián comentó que la nueva propuesta de Magna "garantiza el futuro a largo plazo de Figueruelas, pero que no resuelve el ajuste a corto", además de señalar que "somos optimistas, pero lo que queda por delante es muy difícil".

En la reunión, además de Sebastián, que dijo que no se habló de despidos ni de ayudas económicas, participaron los consejeros de Economía de Aragón, Alberto Larraz, y de Industria, Arturo Aliaga, así como el consejero delegado de Siegfried Wolf, el directivo de General Motors Enrico Digirolamo, y miembros sindicales.

Tanto UGT como CCOO, a través de los secretarios generales en la factoría zaragozana, Pedro Bona y José María Fernando, expresaron su decepción con Magna, que pretende trasladar parte de la producción de Figueruelas a la planta alemana de Eissenach, aunque mantienen su voluntad de diálogo para buscar una solución favorable.

En el Reino Unido, donde Magna podría comprar Vauxhall y Opel a la firma estadounidense General Motors (GM), el sindicato Unite, según la BBC, había suscrito un acuerdo para las fábricas de Luton y Ellesmere Port que garantizaría su actividad hasta 2013.

Además, estas factorías seguirían funcionando y sólo se perderían la mitad de los puestos de trabajo previstos, 600 frente a los 1.200 iniciales, que además serían bajas voluntarias. Los trabajadores que permanecieran tendrían el salado congelado dos años y se aplicarían otras medidas de ahorro de costes.

Por otra parte, el primer ministro del estado federado de Hesse, Roland Koch, uno de los "Länder" alemanes con plantas de Opel, expresó hoy su confianza en que el Reino Unido y España acepten el plan de Magna y que el contrato para la venta, que incluye ayudas germanas por valor de 4.500 millones, se firme el próximo jueves.

La prensa alemana publicaba ayer que la venta de la mayoría del capital de Opel a Magna podría firmarse el jueves si el Reino Unido y España aceptaban los planes de la firma austríaco-canadiense.

El lunes se acordaba reducir los costes de personal en la planta de Amberes (Bélgica) en 20 millones de euros anuales entre 2010 y 2014.