El BCE informó hoy en un comunicado de prensa de que "en el primer semestre de 2010, se retiraron de circulación un total de 387.000 billetes en euros falsos".
Esta cifra representa un descenso del 13 por ciento frente a la cantidad recuperada en los seis meses anteriores (447.000 billetes falsos) y respecto al primer semestre del pasado año (413.000 billetes falsos).
Si se comparan estas cifras con el creciente número de billetes en euros auténticos en circulación (una media de 13.200 millones durante el primer semestre de 2010) la proporción de billetes falsos sigue siendo muy reducida.
"No obstante, el Eurosistema, es decir, el BCE y los dieciséis bancos centrales nacionales de la zona del euro, continúa recomendando a los ciudadanos que se mantengan alerta en relación con los billetes que reciben en las operaciones en efectivo", añade el comunicado.
Las denominaciones de 20 y 50 euros siguen siendo las más falsificadas.
Durante los últimos seis meses, la proporción de billetes falsos de 20 euros disminuyó y la de los de 50 euros aumentó.
En la primera mitad de 2010, la cifra de billetes retirados correspondientes a cada una de estas denominaciones fue prácticamente la misma, lo que en conjunto representa casi el 85 por ciento del total.
El billete de 100 euros es la tercera denominación más falsificada, con un 12 por ciento del total.
La proporción de falsificaciones de las demás denominaciones (5, 10, 200 y 500 euros) es muy reducida.
La mayoría (más del 98 por ciento) de los billetes falsos retirados en el primer semestre de 2010 se detectó en países de la zona del euro, sólo en torno a un 1 por ciento en Estados miembros de la Unión Europea (UE) no pertenecientes a la zona del euro y menos del 0,5 por ciento en otros lugares del mundo.
Los billetes auténticos pueden reconocerse utilizando el método «TOQUE-MIRE-GIRE», descrito en las páginas sobre el euro en la dirección del BCE en internet y en la de los bancos centrales nacionales del Eurosistema.
En caso de duda, el billete sospechoso debe compararse directamente con un billete que se sepa que es auténtico. Toda persona que sospeche que puede haber recibido un billete falso debe dirigirse a la policía, recomienda el BCE.