Detectan en Reus partículas radiactivas en un camión que cargó chatarra en Ascó

CORAL LARROSA 22/04/2008 18:21

Las chatarrerías tienen controles para vigilar si hay contaminación en los materiales que reciben y funcionan. Esto es según el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) lo que ha permitido ayer detectar en una chatarrería de Reus que un camión que llegaba cargado con chatarra, procedente de la central nuclear de Ascó, contenía partículas radiactivas mezcladas con la tierra pegada a la caja del camión.

Concretamente se trata de partículas de cobalto 60, uno de los materiales radiactivos emitidos al exterior, tras contaminarse el sistema de ventilación del edificio de combustible de la central hace cinco meses. Para Juan Carlos Lentijo, director técnico de Protección radiológica del CSN, "si ha salido un camión de Ascó en estas condiciones es un error. Qué duda cabe que no tenía que haber salido. Hemos pedido al titular de la central reforzar todos los controles de materiales que entran y salen de la instalación".

La noticia se ha conocido tras la reunión del Consejo de Seguridad Nuclear con los alcaldes de las trece localidades próximas a Ascó, y representantes de la Asociación de Municipios de Areas Nucleares (AMAC), para ponerles al día de la vigilancia que se realiza en las instalaciones nucleares y en las personas, tras el vertido radiactivo que se produjo en la central hace cinco meses y que se ha hecho público hace unos días porque la empresa no informó del mismo.

Partículas radiactivas

Según el Consejo se han encontrado hasta el momento más de 300 partículas radiactivas, localizadas en las áreas próximas al edificio de combustible donde se produjo el vertido. En palabras de Carmen Martínez Ten, presidenta del CSN "llas mediciones muestran un riesgo radiológico irrelevante Y los controles a los trabajadorres y a los visitantes no muestran radiación. Es racionalmente descartable que haya riesgo para la población ni para el medio ambiente".

Pero los controles continúan en las instalaciones y su entorno y en las personas. De hecho, durante dos semanas van a ser 1.600 las personas revisadas, trabajadores y visitantes de la planta. Entre ellas, 40 niños de un colegio de Gerona que visitó en abril la central de Ascó, aunque no se bajaron del autobús. Los diez primeros alumnos controlados han dado negativo a contaminación radiactiva. Hoy el CIEMAT analizará, por cuenta del CSN, a medio centenar de trabajadores de Ascó en un control de seguridad paralelo.

El Consejo de Seguridad Nuclear ha abierto un expediente a la empresa de la central nuclear de Ascó, tanto por los errores operativos al limpiar la contaminación que ocasionó el vertido al exterior, como por no informar al Consejo y minimizar la importancia del incidente. La sanción, según Martínez Ten podría llegar a los 30 millones de euros.

Las organizaciones Ecologistas en Acción y Greenpeace han presentado una demanda penal por el caso y han pedido al Euratom que intervenga en la investigación de los hechos.