Según informan ambos cuerpos en una nota de prensa conjunta, la mercancía era enviada por vía aérea desde un país asiático, almacenada en un trastero de alquiler en el barrio de la Verneda de Barcelona y destinada a suministrar género a los vendedores ambulantes durante la época estival en céntricas calles de la ciudad.
En la operación se han intervenido 3.400 euros en efectivo así como bolsos, monederos, gafas, cinturones, zapatillas deportivas y relojes, que suman un total aproximado de unos 2.500 efectos falsificados.
La operación conjunta se añade a una ya realizada el pasado día 4 de mayo por ambos cuerpos policiales y por la que se detuvo a dos personas de origen subsahariano y se intervino también abundante material.
Según la policía, investigaciones posteriores permitieron descubrir la existencia de otras dos personas que, en el mismo ámbito barcelonés, se dedicaban a la recepción, almacenamiento y posterior suministro de prendas de vestir y complementos falsificados de marcas internacionales a vendedores ambulantes para su venta en zonas de mayor afluencia turística como el puerto, el Parque Güell, Paseo de Gracia y la Barceloneta.