Así, según los datos de la Dirección General de Tráfico, la A-3 presentaba a las 18:00 horas hasta 19 kilómetros de retenciones a la altura del municipio valenciano de Utiel en sentido hacia la capital de esa comunidad.
En Cataluña, el atasco era de diez kilómetros en la AP-7 en Vilafranca del Penedés, de entrada a Barcelona, y había otros tres kilómetros de retenciones en Esparraguera, en la A-2.
En esa misma autovía, la A-2, un accidente causaba otros diez kilómetros de tráfico muy lento a la altura de Zaragoza capital.
Otra comunidad autónoma donde la circulación es muy dificultosa es Madrid, con retenciones en la A-3 a su paso por Arganda del Rey y hasta Rivas-Vaciamadrid, en la A-4 en Pinto, en la A-6 en El Plantío y en la A-5 en Móstoles.
Por último, los vehículos que se dirigen hacia el País Vasco también se encuentran con retenciones: de once kilómetros en la AP-1 en el tramo entre Monasterio de Rodilla y Burgos capital y de diez kilómetros a la altura de la localidad burgalesa de Santa María Ribarredonda.
Cuarenta accidentes mortales
Entre las 15:00 horas del viernes 26 de marzo y las 24:00 horas de ayer, domingo 4 de abril, se contabilizaron 40 accidentes en los que perdieron la vida 43 personas. Además 32 personas han resultado heridas, 17 graves y 15 leves, según informó la Dirección General de Tráfico (DGT).
La jornada con mayor número de víctimas mortales fue el domingo 28 de marzo, que se cerró con un total de nueve muertos. Sólo en el primer fin de semana de la operación especial de tráfico de Semana Santa fallecieron diez personas y se contabilizaron tres heridos graves y seis leves.
El año pasado se produjeron 45 accidentes mortales en los que fallecieron 46 personas, una media de 4,5 muertos al día, frente a los 12,4 por ciento de fallecidos al día en 2003. De esta cifra total de fallecidos, el 23 por ciento no llevaba puesto el cinturón de seguridad.
IM/JNP