José Antonio Alonso ha explicado que el decreto-ley aprobado por el Congreso hace unos días regulaba una situación de excepcionalidad y de urgencia. El Ejecutivo redactó en su momento el decreto que justificaba la construcción de la tubería si los niveles de agua ponían en riesgo el abastecimiento a Barcelona.
Tanto el Gobierno como el grupo socialista dejaron claro que no se trataba de un trasvase, mientras que el Ejecutivo aragonés decidió recurrir ese decreto por la vía contencioso-administrativa.
"Si la falta de agua persistiera, se seguiría haciendo lo que el decreto establece, si desaparece la causa, las previsiones de la norma carecerán de sentido", ha matizado Alonso.
El portavoz socialista, que ha expresado su deseo de que las lluvias recientes favorezcan la derogación y ha subrayado que la situación que existía en Barcelona antes de los últimos aguaceros exigía la urgente atención del Gobierno.
A favor de la derogación de dicha norma también se ha manifestado el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Ridao. El diputado catalán ha subrayado que las lluvias de los últimos dos meses en Cataluña ha aumentado la reserva de agua en un 95 %, pues han aportado 120 hectómetros cúbicos, más del doble de lo que preveía desplazar la tubería de conducción, entre los 30 y 50 hectómetros cúbicos. CGS