Oceana pide proteger los bosques submarinos igual que los de tierra, porque algunos están al borde de la extinción

EUROPA PRESS 21/06/2016 13:10

Con motivo de la reunión de la Comisión OSPAR esta semana en Tenerife, Oceana recuerda su lucha desde hace años por que estos bosques queden incluidos en la lista de hábitats amenazados y/o en peligro del Convenio OSPAR, así como una "gestión adecuada" para los casos en los que ya hay medidas de protección.

En concreto, advierte de que una de las principales amenazas para ellos en el Mediterráneo es la pesca de arrastre que está llevando al bosque de quelpos en el Mar Adriático al borde de la desaparación.

Además, en el Atlántico lamenta que los países europeos no se ponen de acuerdo para incluir los bosques submarinos en la lista de hábitats amenazados. La ONG apunta que en el Atlántico el retroceso de los quelpos ha llegado a la "extinción total en algunas zonas". En ese océano, denuncia que muchas especies carecen de medidas de protección pese al grave estado en que se encuentran por causas como el calentamiento del agua, la contaminación o la sobreexplotación comercial.

La ONG ha denunciado también que los bosques de laminarias, como el bosque de Laminaria rodriguezii, que se están reduciendo en aguas europeas a un ritmo del 85% en los últimos 40 años debido a la sobrepesca y advierte de que su situación es "especialmente preocupante" en las zonas más meridionales, según revela una publicación científica en la que han participado Oceana y expertos de siete países diferentes.

Laminaria rodriguezii está protegida por el Convenio de Barcelona y dentro de España uno de sus bosques más relevantes se halla en una zona incluida en la propuesta de Oceana para ampliar el Parque Nacional de Cabrera.

Estos ecosistemas son tan productivos como las selvas tropicales y están amenazados, por lo que la organización internacional de conservación marina pide que reciban protección efectiva frente a agresiones como la pesca de arrastre.

El coautor del estudio y director de investigación de Oceana Europa, Ricardo Aguilar, ha señalado que mientras los incendios forestales generan alarma social, la desaparición de los bosques de algas está pasando desapercibida. "Es urgente tomar medidas efectivas antes de que sea demasiado tarde para proteger hábitats de los que dependen un gran número de especies", ha apostillado.

Los bosques de laminarias o quelpos proporcionan alimento y cobijo a numerosos peces, invertebrados mamíferos, y aves, pero son muy sensibles a la contaminación, el cambio climático y la sobrepesca.