Procesan a un hombre acusado de violar a su hija durante 20 años en Argentina

AGENCIA EFE 11/05/2009 19:34

"Me equivoqué en todo, pido que me perdonen", dijo Armando Lucero, también apodado "el monstruo de Mendoza", tras llegar al juzgado provincial con una fuerte custodia policial y rodeado de periodistas.

Lucero, quien permanece detenido desde el viernes en una cárcel de la ciudad argentina Mendoza, capital de provincia homónima, fue procesado por abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo.

El hombre, también acusado de abusar de algunas de las hijas que tuvo con otra pareja, fue apresado a raíz de una denuncia de una hija suya de 35 años, quien aseguró que era sometida a abusos desde los 15 años.

La mujer declaró a la justicia mendocina que era sometida bajo amenazas de muerte, que tuvo siete hijos incestuosos, de edades que van de los 2 a los 19 años, e hizo la denuncia por temor a que su padre también violara a una de las hijas de ambos.

El fiscal que investiga la causa, Marcelo Gutiérrez del Barrio, indicó que le practicarán al detenido pruebas de ADN para confirmar si tienen vinculación genética con los niños de su hija.

"La pena es de 50 años, el máximo. Por el momento han prestado declaración dos personas más. La idea es avanzar en la investigación. Tenemos conocimiento del delito sexual, y es lo que vamos a investigar, lo que surja también será considerado", explicó el fiscal.

Los presuntos hijos incestuosos tienen 19, 17, 16, 12, 11, 6 y 2 años y quedaron bajo la protección de un tribunal de familia, añadió Gutiérrez del Barrio.

Por su parte, la jueza Elsa Galera pidió no difundir datos de la familia y reclamó a los medios de comunicación que se abstuvieran de exhibir el rostro del acusado para "tutelar los derechos" de los niños afectados en esta causa.

La justicia de Mendoza ordenará en los próximos días un conjunto de medidas de asistencia psicológica para la familia de Lucero, anticiparon portavoces judiciales.

Un hijo de Lucero, de 37 años, fruto de otra relación aseguró este fin de semana que él ya había denunciado a su padre, pero dijo que su madre "es oficial de Justicia y tapaba todo".

"Gerardo", como fue denominado por los medios locales, dijo que su padre "nunca trabajó" para sostener a los seis hijos, tres varones y otras tantas mujeres, que tuvo con su madre, a quien acusa de encubrir los abusos en su condición de oficial de justicia de los Tribunales de Mendoza, a 1.000 kilómetros al oeste de Buenos Aires y vecina a Chile.

Lucero es apodado "el monstruo de Mendoza" por la similitud con el caso del austríaco Josef Fritzl, "el monstruo de Amstetten", condenado en marzo pasado a prisión perpetua por el asesinato de uno de los hijos que tuvo con su hija Elizabeth, a quien había secuestrado y violado.