Hasta ahora, los servicios de emergencia han rescatado en aguas del estrecho de Gibraltar a once personas con vida y ocho cadáveres (un hombre y siete mujeres, varias de ellas embarazadas). Las autoridades creen que aún se encuentran desaparecidas otras 14 personas que viajaban en la patera que se dirigía hacia costas gaditanas.
Este último naufragio es uno de los más graves ocurridos en lo que va de año y eleva a 70 las personas fallecidas cuando intentaban llegar a costas españolas en 2009. Esta cifra es difícil de determinar, pues la mayoría de los inmigrantes muertos durante el viaje desaparece en las aguas y tan sólo los testimonios de los supervivientes permiten hacer una aproximación de lo ocurrido.