Salt, ¿problemas de convivencia, inseguridad o xenofobia?

INFORMATIVOS TELECINCO 26/02/2010 11:39

Para el Ayuntamento, el problema principal es "la multireincidencia de pequeños delincuentes", un asunto de seguridad que "ya se ha comunicado a la Consellería de Interior de la Generalitat", donde los vecinos y comerciantes también enviaron una carta hace unos días.

La preocupación también se aprecia en los inmigrantes de Salt. Para Outaile Benabid, de Accem, aunque "hay un problema de convivencia, se puede arreglar. Para ello, "hay que reconducir la situación y tener la agilidad para actuar lo antes posible, mediando y dialogando y, en segundo lugar, si hay gente que ha realizado algún hurto o algún otro delito, que sean buscados y juzgados sean de donde sean" ya que "la inseguridad es un tema aparte que hay que combatir entre todos".

Benabid indica que "a nadie le gusta vivir en un ambiente crispado" y que "la inseguridad y la intranquilidad son compartidas". En Salt, algo más del 40% de la población es inmigrante y conviven 75 nacionalidades distintas.

Incidentes en el pleno

Esa crispación se ha acentuado especialmente en la localidad durante esta semana. El lunes la alcaladesa suspendió el pleno por una manifestación de 300 vecinos que reclamaban más seguridad. El jueves, la policía local tuvo que desalojar a dos personas que increpaban a la alcaldesa Iolanda Pineda (PSC) durante el pleno.

Los incidentes comenzaron cuando la alcaldesa pidió a los presentes en la sala, en la que había unos 70 vecinos, que apagasen sus teléfonos móviles. Dos de los presentes le gritaron a Iolanda Pineda que no era necesario hacerlo porque les habían "robado sus teléfonos", además de proferir otros gritos contra el equipo de gobierno.

Ante la insistencia de los aspavientos de los dos vecinos, la Policía Local los sacó a la fuerza de la sala, y el pleno continuó. Mientras tanto, en el exterior del ayuntamiento, los gritos de los dos vecinos expulsados atrajeron la presencia de otras personas descontentas y de grupos de inmigrantes que reclamaban ser reconocidos tan vecinos de la población como ellos. Allí empezó una pelea verbal entre unos y otros que obligó a la Policía Municipal y a los Mossos d'Esquadra, a intervenir en varias ocasiones.

Frente al consistorio se reunieron decenas de inmigrantes subsaharianos y marroquíes, uno de ellos, Mourat Al Hassan, pidió que no se utilizara al colectivo inmigrante con objetivos políticos. Según Al Hassan, que vive en Salt desde hace muchos años, la situación de inseguridad en el municipio no es verdad que haya empeorado y ha asegurado que robos ha habido siempre y que lo único que estaban intentando ahora los grupos de CiU y PP era utilizar la supuesta inseguridad y la inmigración para intentar llegar al gobierno municipal.

Manifestación de inmigrantes

El grupo de marroquíes ha apuntado a la actual alcaldesa de Salt como la única que ha hecho algo por conseguir la cohesión ciudadana y han reclamado que se les trate igual que al resto de vecinos, ya que pagan igual los impuestos. Horas más tarde, un centenar de inmigrantes, la mayoría de origen marroquí, se manifestaron espontáneamente ante el Ayuntamiento. Los manifestantes se han sentido señalados por las protestas de los últimos días y la campaña abierta con pancartas en los establecimientos que han sufrido robos.