'Vendetta' en Montmeló

MALENA GUERRA 20/01/2009 21:30

Las armas las iba a proporcionar el capo Marco Assegneti detenido en Escalona, Toledo, en diciembre. En Escalona vivía su novia y tanto ella como su familia le dieron cobertura para conseguir el armamento.

El de Assegneti es un caso raro porque lo normal es que los capos se instalen en la costa catalana. Allí pasan desapercibidos entre la colonia italiana. Es el caso de Salvatore Zazo, detenido el fin de semana en Barcelona. Zazo vivía discretamente y utilizaba un locutorio para dirigir sus negocios de narcotráfico. Ahora se investiga su conexión con los cárteles colombianos de la droga. Los investigadores creen que les ayudan a crear sucursales en España y que, en breve, podría haber detenciones de traficantes sudamericanos que trabajan para los capos italianos.

¿Por qué utilizan locutorios? Porque son lugares donde es fácil esconderse entre gentes de distintas nacionalidades y no llmana la atención. Además dificultan la labor al no usar teléfonos que pueden ser intervenidos. Otro detenido en un locutorio fue Paolo Pesce, un sicario con 30 asesinatos a cuestas que llevaba 17 años huido de la justicia italiana. Muy peligroso y armado hasta los dientes, hubo que detenerle en cuento fue localizado en Fuengirola, Málaga.

La Guardia Civil tarda unas dos semanas en localizar y detener a los capos que los carabinieri italianos situan en España. Estudian todas sus relaciones de antaño, sus amigos, vecinos....y al final todos son encontrados. Algunas veces, como pasó con Patricio Bosti, localizado en la Costa Brava, tardan más. Este capo había cambiado su imagen tanto que fue complicado identificarle mediante fotografía. Los capos recurren incluso a la cirujía para esconderse. La Guardia Civil afirma que los clanes napolitanos están abriendo sucursales en países como España o Australia. Crean extructuras para manejar sus negocios de tráfico de droga, armas y blanqueo de dinero, lejos de Italia donde son acosados por la policía. En Nápoles ya no hay un "capo dei capi", ahora la Camorra se divide en pequeños clanes familiares y todos se disputan los "negocios", y el territorio.