La acusada de quemar vivo al hombre que violó a su hija dice que sólo pretendía asustarle

INFORMATIVOS TELECINCO / AGENCIAS 24/03/2009 16:12

El ministerio fiscal solicita en sus conclusiones provisionales un total de nueve años y seis meses de prisión para María del Carmen G.E. Piden siete años y medio por un delito de homicidio y dos años de prisión por un delito de homicidio en grado de tentativa, puesto que al rociar de gasolina a la víctima, otro hombre quedó impregnado del líquido inflamable y sufrió quemaduras en la pierna izquierda. En su defecto a esta última medida, solicitó un año y seis meses de prisión por lesiones dolosas.

El fiscal pide que la mujer indemnice a la viuda del fallecido con 60.000 euros y a cada uno de sus cuatro hijos con 12.000 euros, así como 10.930 euros para el hombre herido y otros 8.295,58 para el dueño del bar por los desperfectos causados por el fuego.

La acusación particular solicita para la procesada un total de 30 años de prisión , de los cuales 17 son por un delito de asesinato, siete por tentativa de homicidio y seis años de cárcel por el incendio del bar. La defensa pide la libre absolución al considerar que cuando sucedieron los hechos la mujer sufría un trastorno mental.

Durante la declaración en el juicio que se ha celebrado en la sección séptima de la Audiencia Provincial de Alicante, ubicada en Elche (Alicante), María del Carmen G.E.,que se encuentra en tratamiento médico desde que su hija fue violada, ha señalado que "en ningún momento" quería matar al hombre que violó a su hija, y que "le echó gasolina para asustarlo, para que se fuera de allí" y para que "no se acercara a su hija".

Dificultades para recordar

La mujer ha mostrado dificultades para recordar cómo se hizo con una botella de litro y medio de gasolina y entró en el bar donde había visto meterse al fallecido. Además, no recordaba el momento en el que derramó la gasolina sobre la víctima y le prendió fuego, sólo que "salió corriendo de allí" y llegó hasta Alicante. Otros testigos presenciales, han declarado que la hija de la acusada se tomó un café e hizo una llamada telefónica.

Pocos minutos después entro la madre, según los testigos. Roció con gasolina al fallecido y le prendió fuego. La victima ardió en el momento en el que comenzó el fuego y fue ayudada por el dueño del bar que utilizó un extintor. Tras eso fue atendida por el SAMU y falleció a los 10 días a acusa de las quemaduras de tercer grado que sufrió en el 60 % de su cuerpo. Asimismo, el hombre que conversaba con el fallecido sufrió quemaduras en la pierna izquierda, de las que tardó 231 días en curar. CGS