El móvil del asesinato fue un ajuste de cuentas motivado por una estafa por valor de 50.000 euros realizada por el joven camerunés asesinado contra el presunto autor material del crimen, que permanece huido, según la misma fuente
El presunto autor del crimen, que permanece huido, pudo ser ayudado a perpetrar el asesinato por un sobrino, también de origen ruso y actualmente refugiado en su país; otro hombre de la misma nacionalidad ha sido detenido y ha ingresado en prisión como colaborador necesario y encubridor del delito.
El 28 de mayo de 2008, varios trabajadores del "Eco-parque" de Villamediana de Iregua (La Rioja) descubrieron en la cinta transportadora de la basura varias partes del cuerpo de una persona de raza negra, hecho que denunciaron a la Guardia Civil.
Especialistas del Laboratorio de Criminalística del Instituto armado, tras tres días de trabajo, lograron la recuperación de casi la totalidad del cadáver, que identificaron como el de Jean Miafeu, con domicilio en Calahorra (La Rioja).
Con las pruebas e indicios obtenidos tanto en el Eco-Parque como en el domicilio de la víctima y los primeros datos de la autopsia practicada, los investigadores enfocaron sus pesquisas en el entorno de personas que se relacionaban con el fallecido.
Los agentes centraron su investigación en Arnedo (La Rioja), lugar donde la persona asesinada había mantenido sus últimos contactos, al parecer con personas de países del este y de Marruecos.
Los investigadores concluyeron que el móvil del asesinato podría ser un ajuste de cuentas motivado por una estafa de 50.000 euros, por el procedimiento de los billetes tintados, cometida por el fallecido contra el presunto autor material del crimen.
De la complejidad de la investigación da cuenta el hecho de haber tenido que requerir el envío de comisiones rogatorias a países comunitarios como Francia y Bélgica, según la Guardia Civil, que ha solicitado a dos juzgados de Logroño y Calahorra sendas órdenes internacionales de búsqueda y captura.
Además, el pasado mes de marzo agentes de la Policía Judicial detuvieron al ruso I.M. como presunto encubridor y colaborador necesario del asesinato por ser la persona que traslado los restos del cuerpo del fallecido hasta el Eco-parque.
I.M. fue puesto a disposición judicial, que decretó su ingreso en la prisión de Logroño.
La víctima perpetró la estafa conocida como de los "billetes tintados" contra su presunto asesino a principios de enero de 2008 en un hotel de Bélgica.
Una vez realizada la estafa, el joven camerunés desapareció con el dinero pero en abril de 2008 fue localizado en Logroño por su asesino, quien perpetró el crimen en su casa de Arnedo, según la investigaciones de la Guardia Civil.