Autoridades defienden el tiempo de respuesta al tiroteo en Binghamton

AGENCIA EFE 06/04/2009 00:52

El viernes, Jiverly Wong, un estadounidense de origen vietnamita, irrumpió en un centro de atención a extranjeros en Binghamton (Nueva York), mató a 13 personas e hirió a otras 12 antes de quitarse la vida.

Las autoridades ofrecieron hoy explicaciones sobre por qué la policía tardó casi 45 minutos para entrar al edificio del centro American Civic Association, en la localidad de Binghamton.

"Ninguna decisión de la policía tuvo un efecto sobre los que murieron", dijo durante una rueda de prensa el fiscal del Condado Broome, Jerry Mollen.

Señaló que, después de que la policía se presentó en el centro de inmigrantes, "no hubo más disparos", y "tampoco se hubiera salvado ninguna de las víctimas, aún si la policía hubiese entrado en el primer minuto".

Los médicos forenses a cargo de las autopsias determinaron que nadie se hubiera salvado porque "las lesiones fueron severas", observó Mollen.

Por su parte, el jefe de la policía de Binghamton, Joseph Zikuski, dijo que las primeras llamadas se recibieron a las diez y media de la mañana hora local (14.30 GMT), y que la policía tardó un par de minutos en obtener los datos porque quienes llamaron tenían un acento fuerte.

En todo caso, los primeros vehículos de patrulla llegaron al centro tres minutos después de la primera llamada, aseguró.

Zikuski dijo que, al no escuchar más balazos, la policía pensó que no había un "atacante activo" al interior del edificio y decidió esperar refuerzos de los equipos especiales de la policía, denominados "SWAT".

Un equipo de esa unidad policial entró al edificio 43 minutos después de la primera llamada.

Acosado por los periodistas, Zikuski insistió en su respuesta de que la policía hubiera entrado al centro si los disparos hubieran continuado.

Visiblemente molesto por las mismas preguntas, Mollen replicó: "no me parece justo que el jefe (de policía) Zikuski responda a situaciones hipotéticas".

Mollen aseguró que las autoridades analizarán la respuesta al tiroteo y emitirán un informe completo, aunque no precisó fecha.

Según las autoridades, Wong, de 41 años, provenía de una familia de origen chino que vivía en Vietnam, y se había cambiado el apellido a Voong.

El atacante vivía con sus padres en la localidad de Johnson City, en las cercanías de Binghamton.

Wong había empezado a tomar clases de inglés en el centro, pero las abandonó la primera semana de marzo.

Al parecer, Wong estaba extremadamente frustrado porque la gente se burlaba de él y, según Zikuski, "pensó que lo denigraban" por su limitado inglés.

Armado con dos pistolas semiautomáticas y protegido por un chaleco antibalas, Wong bloqueó la salida del edificio con su vehículo y, acto seguido, entró al centro donde los inmigrantes se encontraban en una clase de inglés.

Algunos, para protegerse, se escondieron durante horas en el sótano del edificio.

La recepcionista del centro, que fingió estar muerta y se ocultó bajo su escritorio para llamar a la policía, figura entre los heridos y se encuentra en estado de grave, según las autoridades.

La policía de Binghamton divulgó hoy la lista de las 13 víctimas, identificándolas por su nombre, edad y nacionalidad.

Entre las víctimas figura Almir O. Alves, un brasileño de 43 años; inmigrantes de las Filipinas, China, Haití, Pakistán, Irak y Vietnam, además de un estudiante estadounidense.

Se desconoce el motivo del crimen, pero las autoridades han descartado que se trate de un plan terrorista.