Los transportistas de Guipúzcoa han protagonizado una sonora protesta en contra de los nuevos peajes que les quiere poner la Diputación gobernada por Bildu. Estas nuevas tasas afectarían a cuatro carreteras importantes, como la nacional 1, la A-15, la 121-A, conocida como Endarlatsa y en el puerto de Deskarga.
Es la primera vez que el sector se une en una protesta en la que han participado cerca de 200 camiones. Primero, han recorrido algunas carreteras guipuzcoanas para acabar entrando en la capital entre pitidos. Aseguran que si se aprueban los peajes, muchos tendrán que dejar el trabajo porque les podría suponer unos 7.000 euros al año, una cifra imposible de trasladar hoy día al cliente con la crisis general que vive el país. El proyecto de norma se debatirá el 15 de enero en las Juntas, donde previsiblemente, será rechazado con los votos en contra de PNV, PSE y PP.