Esta escritora afirma que las facciones de tu rostro determinan los deseos sexuales de las personas. Esta afirmación está reforzada porque desde hace 3.000 años en China se estudia la fisonomía de la cara y es en esta parte del cuerpo donde se generan más de 7.000 expresiones con las que manifestamos alegría, enfado y sorpresa, informa noticias24.com
Con esta base, la investigadora británica asegura que hay señales que te ayudan a identificar cuáles son las posiciones sexuales qué prefieres de acuerdo con la forma de tu cara, lo pasional o leal que eres. Estos son tus características según la forma de tu boca, nariz, ojos y cejas:
Si tienes una boca grande gozas de gran placer. Los hombres suelen ser más resistentes en la cama. Los labios carnosos son típicos de un espíritu aventurero, con tendencias hacia la infidelidad.
Tracey Cox dice que si tu boca es ancha entonces eres una persona ambiciosa y dominante. Pero si es pequeña tiendes a ser muy creativa, alcanzas muy rápido el orgasmo y no son cariñosas.
La forma de la nariz fina y puntiaguda es un rasgo de ser una persona muy soñadora y romántica. Gozas del sexo suave y del amor. Las posiciones sexuales que prefieres son las clásicas y te desinteresas de tener aventuras eróticas. Todo lo contrario sucede con personas con una nariz irregular. A ellas les encanta el sexo, tenerlo en todo momento y en cualquier lugar.
Los ojos también revelan cómo eres en el sexo. Si los tuyos son claros, entonces disfrutas del erotismo rápido y con diferentes niveles de excitación que te ayudan a aumentar la libido, aunque eres poco romántica.
En cambio, los ojos oscuros expresan pasión y adoran los maratones de sexo, se consideran explosivas en el sexo y prefieren la cama como el lugar más atractivo para hacerlo.
Esta parte del rostro dice más de lo que imaginas, pues además de ser el marco de la cara, si son gruesas y tupidas significa que eres una persona experta en el sexo y que buscas nuevas experiencias, cuanto más eróticas, mejor. Las cejas finitas y con poco vello demuestran interés hacia la parte espiritual del amor, el romanticismo y la sensualidad.