Aunque el Gobierno ha propuesto ampliar el límite hasta los 26 años, este colectivo no considera que sea suficiente. La presidenta de la CNSE, Concha Díaz, ha afirmado que "los audífonos se rompen o se quedan obsoletos, pero la necesidad de los usuarios, cuando estos son niños o jóvenes, no acaba a los 26 años sino que permanece para toda la vida".
Por otro lado, Díaz también ha destacado que más del 71 por ciento de la población sorda tiene 65 años o más. "Muchas personas pierden la audición con la edad y deben utilizar uno o dos audífonos, y no todas tienen una situación económica tan desahogada para costeárselos. Las prótesis deben dejar de ser bienes de lujo para las personas sordas y sus familias", ha señalado.