Así lo ha manifestado en Vigo tras el descubrimiento de una placa en homenaje a la agente fallecida Vanessa Lage, donde ha hecho hincapié en que en 2015 hubo "un descenso importante --del 7%-- en el número de delitos y en particular de los delitos violentos", aunque ha lamentado que eso "no significa que no ocurran hechos" como el fallecimiento de la policía nacional viguesa.
Según ha remarcado, "afortunadamente" en Vigo hay una "gran comisaría" con casi 400 efectivos que, con su trabajo, permiten que la seguridad en la ciudad vaya "bien". Además, ha resaltado la buena cooperación que hay con la Policía Local y la Guardia Civil, y ha apuntado que "ese conjunto hace que la seguridad ciudadana vaya bien".
Cosidó ha remarcado que una de sus prioridades como director general de la Policía es "mejorar la protección y seguridad de los policías nacionales" y ha puesto en relieve que a pesar de que en los últimos años se ha pasado por un "momento de mucha escasez presupuestaria" se ha puesto en marcha un programa por el que se han adquirido 21.000 chalecos antibala y anticorte individualizados.
Tal y como ha dicho, esto ha permitido entregar este elemento de protección "imprescindible" a "prácticamente todas las unidades de seguridad ciudadana de España, si bien ha reconocido que "todavía quedan unos casos y algunas unidades" por dotar, por lo que este año tienen previsto adquirir "otros 5.000 chalecos".
En total, ha incidido en que el gasto total por la compra de estos 26.000 chalecos, adquiridos durante esta legislatura, "está en el entorno de los ocho millones de euros", ante lo que ha recordado que su "presupuesto de inversiones anualmente está en poco más del doble de lo que este esfuerzo ha supuesto".