En el momento de su desaparición, la joven vestía camiseta blanca y pantalón negro vaquero. La joven, de origen marroquí, reside con su familia en el número 5 de la calle Nuestra Señora de la Almudena.
La madre, muy afectada, ha asegurado que la menor no tenía problemas con nadie de su entorno y que, tras su desaparición, preguntó a los amigos de la muchacha, quienes le comunicaron desconocer cuál fue el último paradero de la menor.
La familia ha denunciado ya la desaparición en Policía Nacional, mientras que la Federación Local de Asociaciones de Vecinos ha distribuido carteles con la imagen de la joven, su descripción y la ropa que llevaba el día en que desapareció.