Expertos aseguran que se tarda "5 o 10 minutos" en obtener el certificado de delitos sexuales para poder ser voluntario

EUROPA PRESS 30/03/2016 15:15

"Si tienes certificado digital o DNI electrónico son cinco o diez minutos --ha asegurado--. Te metes en la página web del ministerio de Justicia, hay un enlace para entrar con certificado electrónico y se hace en cinco minutos. Nosotros lo hemos hecho".

Si no, hay que entrar también en la página web del Ministerio de Justicia (http://www.mjusticia.gob.es/cs/Satellite/Portal/es/servicios-ciudadano/tramites-gestiones-personales/certificado-antecedentes), descargar y rellenar el impreso, imprimirlo y, o bien presentarlo presencialmente (en el caso de Madrid en el Punto de Información de Voluntariado de la calle Madrazo), o enviarlo a través de una oficina de Correos (hay que llevar el sobre abierto para que lo sellen conforme se ha presentado y una copia compulsada del DNI).

Según ha explicado durante una ponencia organizada por la Plataforma del Voluntariado de España, el procedimiento para solicitar la acreditación se ha diseñado de modo que no sea "un obstáculo" para hacer voluntariado y se expenderá de forma gratuita.

El certificado de delitos de naturaleza sexual (CDNS) que, con las nuevas lesyes del Voluntariado y la Infancia, deberán exigir las organizaciones de voluntariado que trabajen o tengan contacto con menores a sus colaboradores y trabajadores, servirá para proteger no solamente al menor sino también a las entidades, en caso de que ocurra un incidente.

Benlloch ha indicado que, incluso en los casos en que se trata de una colaboración puntual, si el voluntario va a tener contacto con menores "no hay más remedio que pedirlo", aunque no sea necesario un acuerdo de incorporación a la entidad como voluntario. "Si luego hay un problema te cascan con todo el equipo. Nadie te va a sancionar, pero si luego hay un problema...", ha advertido.

Además, el CDNS solamente da resultado positivo (es decir, si hay delitos de naturaleza sexual, aunque sin especificar cuáles) si existe una sentencia en firme sobre dichos delitos y solamente de aquellos delitos que especifica la ley y no otros similares.

En todo caso, ha explicado también que el certificado tiene una vigencia limitada y que corresponde a las organizaciones decidir cada cuánto piden a sus voluntarios que renueven la acreditación.

La ley contempla también un certificado por otra clase de delitos para acceder a actividades de voluntariado con otros colectivos, como víctimas de violencia de género o de terrorismo, y no permite que personas que han cometido (con sentencia en firme) otros delitos especificados en la ley realicen actividades de voluntariado relacionadas con dichos colectivos.

En este caso, se contemplan excepciones, como aquellas organizaciones que proponen el voluntariado como una herramienta de reinserción para reclusos, según ha especificado Benlloch.

PROFESIONALIZAR EL VOLUNTARIADO

El profesor universitario se ha mostrado convencido de que la obligatoriedad de solicitar el certificado ayudará a desarrollar la "cultura de la documentalidad" entre las organizaciones y mejorar su "profesionalización".

"Vamos a ser serios y vamos a hacer las cosas bien --ha manifestado--. Si uno está de prácticas profesionales, ¿donde está el acuerdo con la universidad?; si uno está de becario, ¿donde está la beca?; si uno está de voluntario, ¿dónde está el acuerdo de incorporación?".

En este sentido, ha puesto de relieve que una de las novedades de la ley del voluntariado consiste en la definición precisa del concepto de voluntariado para evitar que se haga abuso de la figura del voluntario y se utilice a voluntarios para amortizar puestos de empleo o quitar servicios públicos.

¿VOLUNTARIOS O TRABAJADORES GRATUITOS?

"El voluntariado ejerce una labor complementaria pero la responsabilidad de la ejecución de los proyectos privados y públicos no es de los voluntarios", ha subrayado.

Por eso, se ha mostrado contrario a que las organizaciones permitan que un voluntario dedique "todo su tiempo", lo que a su juicio es realmente "trabajo gratuito" y no voluntariado. "Eso es un puesto de trabajo que tiene que salir al mercado y que alguien lo acepte", ha expresado.

RETOS PENDIENTES

Por otra parte, ha señalado que el proyecto que presentó la Plataforma del Voluntariado "no está al cien por cien" pero sí "al 85%". "La ley abre puertas suficientes para empezar a trabajar. Yo no soy partidario de regularlo todo, tienes que dar principios generales, dejar muy claro lo que es la esencia del voluntariado, pero no reglamentar absolutamente todo", se ha mostrado convencido.

En todo caso, ha incidido en que sí era importante que la ley reglamentara la solicitud de documentos para acreditar que el voluntario no ha cometido delitos de naturaleza sexual, porque "la documentación es importante" y es una cuestión de "seriedad y profesionalidad". "Que la gente se acostumbre", ha manifestado.

Aparte de algunas "cuestiones sistémicas", entre algunos de los aspectos que los impulsores de la norma desearían que se hubiera desarrollado más figuran, por ejemplo, que los inmigrantes en situación irregular tuvieran en el voluntariado una forma de regularizar su situación.

También se encuentra la cuestión del empleo juvenil, en la que considera que "se podría haber mucho ido más allá" del reconocimiento de competencias. "Especialmente en la situación en que estamos de absoluto desastre ya no solamente porque sino también por las situaciones de pobreza extrema y de exclusión social que hay de muchos jóvenes por ese motivo. Yo entiendo que se ha podido llegar hasta donde se ha podido llegar", ha explicado.

Aún así, ha expresado su "agradecimiento público" a la directora general de Servicios para la Familia y la Infancia porque "se empeñó y ha salido". "Es una ley muy dialogada. Yo creo que debe haber pocas leyes en España para las que ha habido 500 aportaciones de comunidades autónomas, de centros directivos de la administración y de entidades", ha añadido.

MENORES VOLUNTARIOS

Además de los retos señalados por Benlloch de cara al futuro, el presidente de la Plataforma de Entidades de Voluntariado de la Comunidad de Madrid (FEVOCAM), Jorge Hermida, ha apuntado también la importancia de desarrollar la figura del voluntariado de los menores para "fomentar bien el trabajo del menor voluntario" y centrar su acción en la "sensibilización, divulgación y promoción" de los valores del voluntariado.

En este sentido, la directora general de Servicios para la Familia y la Infancia, María Salomé, ha señalado que la nueva ley incorpora el voluntariado como una actividad "para todas las edades" como una de las novedades respecto a la anterior versión de la norma y ha recordado que la Ley de Protección de la Infancia establece que los menores de edad tienen derecho a "participar plenamente" en la vida social y a "incorporarse progresivamente a la ciudadanía activa" algo que, a su juicio, "entronca directamente con el voluntariado".

Igualmente, Benlloch se ha mostrado convencido de la importancia de promover el voluntariado entre los menores de edad, con las adecuadas medidas de protección porque, pese a las objeciones que hizo la Generalitat de Cataluña de que "nadie puede transformar la sociedad a los 12 años", "hay muchas cosas que puede hacer un menor si se adaptan a su edad".