La grafiosis acaba con dos de los olmos históricos del Real Jardín Botánico, uno de 1893 y el otro de 1944

EUROPA PRESS 22/06/2016 17:11

Los olmos estaban muertos y podían contagiar al resto de los olmos del jardín, ya que ambos tenían numerosas puetas de escarabajo escolítido que actúa con vector de la enfermedad. Los olmos estaban situados en la Terraza de las Escuelas y en la zona de la Rosaleda.

Uno de ellos era centenario, con más de ciento veinte años, ya que se calcula que fue plantado hacia 1893, tras el vendaval que arrasó centenares de árboles en Madrid y una buena parte de ellos en el Botánico. Éste olmo tenía un diámetro de 123 centímetros y un perímetro de 387 centímetros.

El segundo de los olmos, bastante más joven, con una edad de 72 años, fue plantado en 1944 y tenía un diámetro de 98 centímetros y un perímetro de 308 centímetros.

Sin embargo, el Real Jardín Botánico destaca que el simbólico 'Pantalores', uno de los olmos más antiguos de España, que estuvo afectado por grafiosis hace dos años, sigue resistiendo la dureza de la enfermedad, aunque uno de sus cimales se ha secado por completo, mientras que el otro sigue vivo.

Así, estiman que 'Pantalones' al menos aguantará una temporada más, hasta la próxima primavera. En esta época el hongo que le afecta es el más virulento, porque los vasos conductores se ensanchan y hace más fácil su desplazamiento por el tronco y hacia las ramas.

Asimismo, otro olmo centenario situado junto a la Puerta del Rey con toda seguridad tendrá que ser talado en los próximos meses, ya que también se encuentra afectado por grafiosis.

La grafiosis o enfermedad holandesa del olmo es una enfermedad fúngica que afecta al olmo (Ulmus) y que ha acabado con la vida de millones de estos árboles en Europa y Norteamérica.

Está provocada por un hongo del género Ophiostoma -en el caso de Pantalones es el Ophisotoma novo-ulmi, la especie más virulenta-, cuyo organismo ocupa los vasos del xilema y se extiende provocando que las hojas se marchiten y el árbol se muera.

Las esporas viajan en las patas traseras de los escarabajos del género Scolytus -el más común e importante es el Scolytus scolytus-, que actúa como vector epidemiológico de la grafiosis en los olmos.

Durante la primavera, por el ensanchamiento de los vasos conductores del olmo, es más fácil su propagación por todo el árbol, provocando una trombosis basal en el cuello del árbol y en apenas unos días acaba con él de una manera fulminante, sin que los fungicidas que normalmente se le aplican puedan evitar su muerte.