Los investigadores no descartan nuevas denuncias relacionadas con el pederasta en Madrid y otras zonas de España

EUROPA PRESS 26/09/2014 19:24

Los agentes señalan como el primer caso de este pederasta --tras la agresión sexual por la que fue condenado en 1998-- el de una niña china en julio de 2013 en Coslada. Pero a partir de ahora podrían tener constancia de agresiones anteriores a esa fecha u otras durante sus 13 meses de actuación.

Según su 'modus operandi', el conocido como pederasta de Ciudad Lineal actuaba cada dos meses. Así, tras el primer caso en Coslada, el segundo contabilizado fue en septiembre de 2013, cuando raptó a una niña en la madrileña calle Hermanos García Noblejas. Y luego, se le atribuye un rapto consumado en abril de este año en Ciudad Lineal, que repitió en junio y en agosto.

Su actuación se interrumpe entre septiembre de 2013 y abril de 2014. No obstante, cuando los investigadores cotejen las pruebas recogidas en los registros de las casas en los que actuaba, puede que se le atribuyan más casos, algo que no esperan los agentes pero tampoco descartan.

EN BUSCA DEL TOYOTA YARIS

Por otro lado, los agentes encargados del caso siguen buscando el coche Toyota Yaris que utilizó en los primeros secuestros, cuya marca fue facilitada por una de las víctimas. El coche, en cuyo interior podría haber huellas dactilares, fue puesto a la venta. La Policía localizó ayer, en la casa familiar de la calle Santa Virgilia, una multa correspondiente a este coche.

No es el único vehículo que utilizó en sus delitos Antonio Ángel O, quien se dedicaba a la compraventa de coches. De hecho, otro de ellos, un Cintroën Xsara Picasso, que también usó en sus delitos, fue puesto a la venta en Internet y los agentes dieron con él en la Red. Pero podría haber más vehículos y, por tanto, más pruebas. Las mismas fuentes hablan de al menos un Audi.

Tras negarse a declarar ante la Policía, el arrestado anteayer en Santander será interrogado esta noche, una vez llegue a los Juzgados de Plaza de Castilla, por estas y otras muchas cuestiones por la magistrada María Antonia de Torres.