El viceministro de Exteriores iraní para Asuntos Árabes y Africanos, Hossein Amir Abdollahian, ha criticado duramente al Gobierno libio por no tomar las medidas de seguridad necesarias al equipo de cooperantes, al tiempo que ha expresado su esperanza de que los secuestrados sean liberados lo antes posible, según ha informado la agencia de noticias iraní FARS.
La milicia responsable del secuestro ha dicho que el objetivo de la acción es interrogar a los capturados para conocer los motivos de su presencia en el país y saber si han llegado a Libia con la intención de llevar a cabo actos de proselitismo religioso. En junio, el gran muftí de Libia, el jeque Sadik al Ghariani, afirmó que iraníes de la rama chií del Islam estaban llevando a cabo acciones de proselitismo religioso en el país africano.
El martes, la Media Luna Roja de Libia señaló que los siete cooperantes iraníes llegaron el lunes a la localidad como invitados oficiales para ayudar en las tareas de socorro. "La Media Luna Roja de Libia urge al grupo (...) a liberar a los secuestrados en reconocimiento al apoyo y ayuda de la Media Luna Roja de Irán a la revolución del 17 de febrero (de 2011) y en consideración con todas las organizaciones (de ayuda humanitaria) que nos han apoyado", dijo.
Por su parte, Amnistía Internacional (AI) solicitó el miércoles la liberación de los secuestrados. "Los siete miembros de la Media Luna Roja de Irán han de ser liberados", dijo la subdirectora de AI para Oriente Próximo y Magreb, Hassiba Hadj Sahraoui. "Su situación revela la necesidad urgente de que las autoridades libias se impongan a las milicias armadas que están operando fuera de control en el país", agregó.
Por último, la Media Luna Roja de Irán pidió al Gobierno libio que actúe contra los responsables y que consiga liberar a los secuestrados. Asimismo, subrayó que el grupo fue invitado por la rama libia de la organización humanitaria para participar en tareas de cooperación. En este sentido, recordó que se firmó un acuerdo de cooperación justo antes del secuestro, al tiempo que ha pedido al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) que investigue el incidente.