Tras tomarle declaración, el juez celebró la comparecencia de prisión, en el curso de la cual el Ministerio Público solicitó la libertad del detenido. El juez acordó entonces la libertad, ya que no puede ordenar prisión si, como ocurrió en este caso, el fiscal no la solicita.
El instructor, de conformidad con la Fiscalía, le impuso medidas cautelares, entre las que se encuentra la obligación de comparecer dos veces al mes en el juzgado y una orden de alejamiento respecto de tres de los menores a los que "llegó a tocar". Asimismo, se le prohíbe acercarse a parques y colegios de Alcoy.
El resto de adolescentes a los que el juzgado ha tomado declaración refiere, únicamente, comentarios soeces de contenido sexual realizados por el detenido, que queda investigado en una causa abierta por delito sexual.
El detenido, que fue agredido por uno de los adolescentes al que días antes había sometido a tocamientos, no tiene antecedentes penales por delitos sexuales, según han indicado las mismas fuentes.