La madre del menor ha explicado que le pidió al endocrino que le hiciera pruebas a su hijo, ya que si el año pasado pesaba poco más de 100 kilos, ya va por 140. Sin embargo, lamenta que el médico sólo le haya mandado una ecografía y una analítica, pendiente aún de realizarse desde principios del pasado mes de octubre.
Según dijo, su hijo "es el que menos come en la familia, pero aún así es el que más engorda". La madre sospecha que esta situación se deba a un problema de tiroides o a los aerosoles que necesita el menor al ser asmático.
El niño lleva una dieta que la madre le prepara a base de pescado y filetes a la plancha o ensalada. Además, debido a su obesidad, le es imposible caminar porque del roce se hace daño entre las piernas y le ocasiona heridas que la madre le tiene que curar.
La familia sufre además problemas económicos y teme que, como ya le advirtió una asistente social, le quiten a su hijo en caso de que no ponga medios y siga engordando, por lo que lamentó que, encima que no tienen ayuda, le amenacen con quitárselo. LA