Della Callagher se sintió mal después de comer en un hotel de Essex, en Reino Unido. Ella fue una de las siete personas que comieron pavo en el restaurante Railway y después se encontraron mal.
Según pasaba la noche, la mujer, de 46 años, empeoró y fue ingresada en el Queen's Hospital de la localidad de Romford, que la envió a casa poco después, según publica el diario británico DailyMail.
"Estaba muy mal, pero el hospital la mandó para casa. Yo también me encontraba mal, pero ella estaba mucho peor", asegura su marido. "La llevaba yo en brazos, ella se estaba muriendo. Llamamos a una ambulancia, pero ya apenas tenía pulso". La señora Callagher murió poco después por falta de atención médica.
Su marido, furioso, planea ahora acciones legales contra el hospital y el local donde comieron. "Della esta sana y en forma, no puedo creer lo que ha pasado. Estoy destrozado".
Alrededor de otras 30 personas tuvieron que ser tratadas después de comer en el mismo bar. Las autoridades sanitarias han confirmado la presencia en los alimentos que consumieron de una bacteria relacionada con la carne roja.
Los efectos de esta bacteria se suelen notar a partir de doce horas después de haberla ingerido. Puede afectar más gravemente a niños o personas mayores, pero no suele ocasionar la muerte.
El hospital en el que fue ingresada Della Callagher asegura que fue tratada correctamente de su problema y se ha puesto en contacto con los familiares para ofrecerles sus condolencias. Aun así, el Queen's Hospital ha sido acusado en varias ocasiones por casos similares en los últimos años.