La OMS pide a los gobiernos que mantengan la vigilancia porque el virus es "impredecible"

AGENCIA EFE 28/04/2009 07:24

"Es demasiado pronto para decir cómo sería una posible pandemia de esta gripe porcina. La peor pandemia del siglo XX, la gripe de 1918 (que mató a entre 25 y 40 millones de personas) empezó como relativamente leve y luego se hizo muy grave", dijo en conferencia de prensa el director general adjunto para seguridad sanitaria de la OMS, Keiji Fukuda.

El responsable contestaba así a la pregunta de si el hecho de que los casos de gripe porcina identificados en diversos países -excepto los que han causado posiblemente unos 150 fallecimientos en México- son relativamente leves significa que una pandemia no sería tan grave.

"Tenemos que tener mucho respeto con el virus de la gripe, que puede evolucionar de forma impredecible", agregó.

Fukuda confirmó que la OMS mantiene el nivel de alarma pandémica en la fase 4 (de 6), pues aún no existe verificación de que haya habido contagios del virus entre estudiantes de la escuela de Nueva York afectada, y que se hayan infectado alumnos que no estuvieron en México.

"En este momento, una pandemia no es inevitable, pero nos tomamos esa posibilidad muy en serio", señaló.

El "número 2" de la OMS señaló que en el momento en que tengan verificado que la transmisión de persona a persona se ha hecho estable en una comunidad o en una ciudad -es decir, que haya contagiados que no hayan importado el virus de México, donde surgió el foco- entonces se pasará a la fase 5, ya crítica, pues implica un riesgo inminente de pandemia.

"Es muy importante tener en cuenta esa diferencia epidemiológica, pues aunque el virus haya llegado hasta el Reino Unido o Nueva Zelanda, eso no significa que esté establecido en una comunidad", insistió.

Fukuda informó que, de acuerdo con los datos recibidos por la OMS, sólo hay 79 casos de infección en el mundo confirmados por los laboratorios, y de siete muertos, todos ellos en México.

Los casos confirmados por la OMS, que es informado regularmente por los gobiernos son: 40 en EEUU, 26 en México, 6 en Canadá, 2 en España, 2 en Reino Unido y 3 en Nueva Zelanda.

"Sabemos que la situación cambia constantemente y que los países han confirmado más casos, pero estos son de los que hemos recibido información", aclaró el responsable.

Fukuda también dijo que el momento actual, cuando la pandemia aún no es inminente ni inevitable, "es un momento muy importante para que los países se preparen adecuadamente para esa posibilidad".

Y por primera vez desde que comenzó esta crisis, el responsable de la OMS hizo referencia a que en caso de una pandemia mundial de gripe porcina, "serán los países pobres y en desarrollo, los que tienen menos recursos, los que sufrirán las peores consecuencias".

Por ello, dijo, la OMS se compromete a poner a disposición de esos países todos los medios a su alcance para hacer frente a la enfermedad.

Fukuda insistió una vez más en que la OMS no tiene una explicación científica de por qué las infecciones en otros países son relativamente leves mientras que en México se han dado casos de neumonías graves y muertes.

Por otra parte, dijo que la OMS no tiene por el momento planes de cambiar el nombre de esta enfermedad frente a los llamamientos de algunos sectores de productores porcinos o alegaciones de tipo religioso o de defensores de los animales.

"La crisis empezó con el nombre de gripe porcina, y el virus que se ha identificado es un virus de gripe porcina", señaló.

Por su parte, el portavoz de la OMS Gregory Hartl dijo que cuatro laboratorios de referencia la Organización están trabajando para reproducir la cepa de base del virus, necesaria para la fabricación de una vacuna.

E indicó que "la señal (para la producción de vacunas contra la gripe porcina) no será dada antes de entrar en la fase 5" de alarma pandémica.

Ello implicará una reducción drástica en la producción de las vacunas normales contra la gripe estacional, advirtió Hartl, ya que los esfuerzos de los laboratorios con capacidad en esta área deberán concentrarse en los esfuerzos para frenar una eminente pandemia.