Diego ha explicado que los primeros días que estuvo en prisión, acusado de malos tratos a su hijastra, fue bien tratado, pero cuando murió la niña fue tratado "como una mierda" y amenazado, y pese a todo lo que más le ha dolido ha sido perderla "por culpa de un médico", porque la quería muchísimo y era como una hija para él.
En declaraciones a Canarias Radio La Autonómica ha dicho "que haya estado donde haya estado eso se pasa", dijo en referencia a su estancia en prisión, pero "la vida de una niña no se pasa".
Ha detallado que lo que más le ha dolido es oír frases como "asesino, te vamos a matar", así como que le llegaran a enseñar una foto de la niña muerta: "Ha sido lo peor, lo peor, lo peor, para mí lo peor que me ha pasado en mi vida".
El joven ha explicado que cuando la niña cayó del columpio y la llevaron al médico pidió que le hicieran una radiografía y se extrañó de que no le hicieran ninguna prueba y que el facultativo asegurara que en unos días estaría corriendo. Diego ha manifestado que tiene claro que va a emprender acciones legales por lo ocurrido.
"Vamos a por todas, a por médicos, a por lo que haga falta, y vamos a ir poquito a poquito, primero los médicos, luego la prensa, telediarios... todos los que han vertido mierda, todos lo van a pagar".
Diego asegura que se encuentra muy mal, que ya está en su casa pero que recibe medicación. "Ahora mismo estoy sedado, estoy hasta arriba de medicamentos y en manos de un psiquiatra". Ha dicho que le va a costar mucho tiempo olvidar.
Se ha mostrado muy dolido por no haber podido asistir al entierro de la niña, aunque ha dicho que ha recibido muchas muestras de apoyo.
Diego ha comentado que aún no ha podido hablar con Belén, la madre de la niña, y que tiene previsto viajar a Parla, de donde procede la pareja, cuando todo esto haya pasado.