Francisco ha inquirido a los miles de fieles reunidos en la Plaza de San Pedro si "las comunidades parroquiales, en las asociaciones, en los movimientos" son "fieles al programa de Jesús" y ha reiterado que ser "cristiano" es "ser misionero".
En este sentido, ha recalcado que evangelizar a los pobres significa "acercarlos, servirlos, liberarlos de la opresión en nombre de Cristo" y ha destacado que lo primero es poner el ejemplo de la propia vida coherente con las enseñanzas de Jesús.
Por ello, ha incidido en los pobres son el centro del Evangelio. "El anuncio mesiánico del Reino de Dios se refiere preferencialmente a los marginados, a los presos a los oprimidos", ha referido.
"Evangelizar a los pobres es la misión de Jesús y también es la misión de la Iglesia y de todos los bautizados", ha subrayado finalmente.