Los peligros que se esconden entre las sábanas de tu cama

Informativos Telecinco 08/07/2016 12:00

Es uno de los lugares en los que estamos más horas a lo largo del día, aunque sea durmiendo. Sin saberlo, en nuestra cama viven varios seres que afectan a nuestra salud, como los ácaros. Al menos el 10% de la población es alérgica a los ácaros de polvo, según afirma el alergólogo y profesor en el NYU Langone Medical Center, Clifford Basset, tal y como recoge algunos medios como Noticias24 o CÑN.

Los ácaros, que son prácticamente invisibles para los ojos humanos, se alimentan de caspa y piel muerta. El excremento de los ácaros del polvo es según los expertos, altamente alergénico.

Sin embargo los ácaros no son los únicos seres que duermen con nosotros. Uno de esos animales son las chinches, las cuales chupan la sangre de las personas mientran duermen, causando picaduras que provocan picores, aunque no transmiten enfermedades.

Debido a la humedad podemos encontrar otro elemento, el moho verde y negro, cuyas esporas pueden hacer que las personas desarrollen asma, que tengan lesiones en la piel, que desarrollen onicomicosis, que las uñas se desmoronen o incluso neumonía en casos graves si es inhalado. Los hongos también pueden aparecer en las ropas de cama sintéticas, en concreto del tipo "asperguillus fumigatus", los cuales son capaces de invadir cualquier órgano, incluso el corazón, pudiendo resultar letales.

Hay otros animales que también están en las camas y que son prácticamente imperceptibles, como los piojos, capaces de causar con su picadura hasta el tifus, y las hormigas, que durante el día se mantienen ocultas y por la noche salen, causando picaduras. Si tiene perro o gato y duerme con él, tal y como hace el 50% de los dueños de estos animales, los parásitos que tienen estos animales pueden transmitir enfermedades de leves a mortales.

Las cepas mortales de la bacteria del E. coli se podría encontrar en la almohada. Esta bacteria comienza con fiebre y síntomas gripales, aunque puede atacar al cerebro y riñones, causando daños neurológicos, al igual que los productos químicos nocivos que algunos colchones modernos tienen en sus materiales, y que en forma de gases venenosos son absorvidos por la piel.

Para evitar que este tipo de seres descansen entre nosotros, lo mejor que se puede hacer es airear y limpiar la ropa de cama y ponerla al sol, además de evitar que las mascotas se suban a la misma.