Piden analizar el riesgo sanitario del glifosato, el herbicida más usado en Argentina

AGENCIA EFE 13/05/2009 13:44

El Comité Nacional de Ética en la Ciencia y en la Tecnología también pidió al ministro del área, Lino Barañao, que los expertos convocados para integrar la comisión no tengan vinculación académica o económica con empresas del sector, precisó el diario Página/12.

La recomendación fue hecha después de que el profesor de embriología Andrés Carrasco liderara una investigación que concluyó que el herbicida utilizado para la soja transgénica, el principal cultivo de Argentina, puede producir malformaciones neuronales, intestinales y cardíacas.

Para llevar adelante su investigación, Carrasco inyectó dosis de glifosato en embriones anfibios con resultados "totalmente comparables con lo que sucedería con el desarrollo del embrión humano", explicó el investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) y también director del Laboratorio de Embriología Molecular.

Las dosis de herbicida empleadas para el estudio "estuvieron muy por debajo de los niveles que se usan en las fumigaciones", por lo que la situación "es mucho más grave" debido a que "el glifosato no degrada", advirtió Carrasco a Efe en abril pasado.

El lunes pasado, más de 300 científicos y miembros de organizaciones sociales publicaron en la prensa una carta en la que repudiaron los "ataques y amenazas" sufridos recientemente por Carrasco y denunciaron que políticos, funcionarios y comunicadores contratados por corporaciones económicas" buscan "silenciar" esta investigación.

La Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes y la Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos afirmó el mes pasado que el glifosato está "clasificado entre los productos que normalmente no ofrecen peligro" y aseguró que "es utilizado con éxito en todo el mundo, clasificado como de baja toxicidad".

En Argentina se utilizan anualmente entre 180 y 200 millones de litros de glisofato, producido por la multinacional Monsanto, para fumigar 18 millones de hectáreas de cultivos.

Carrasco puso como ejemplo lo ocurrido en Ituzaingó, una barriada de 5.000 personas en la periferia de Córdoba (centro de Argentina), donde en los últimos ocho años se constataron cerca de 300 casos de cáncer asociados a las fumigaciones con plaguicidas.

Ante las denuncias judiciales relacionadas con el uso desproporcionado de pesticidas en el cultivo de soja transgénica, en febrero último el Ministerio de Salud creó un grupo para investigar la problemática en cuatro provincias argentinas.

Argentina es el tercer exportador mundial de soja y ocupa también puestos de relevancia en el comercio global de derivados (aceites y harinas) de ese grano.