El hombre cometió el crimen sobre las 9 horas del miércoles en el número 646 de la calle Còrsega de Barcelona, donde vivía con la mujer, de 48 años, y después lo confesó a la policía, indicándoles donde estaba el arma homicida.
El anciano, que convivía con la mujer en el piso aunque no estaban casados, fue detenido poco después de los hechos, de los que alertó él mismo a una vecina, como presunto autor de la muerte de su pareja.
Con este caso y el ocurrido este jueves en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), ya son 40 las mujeres muertas en España a manos de su pareja o expareja en lo que va de año, ocho de ellas en Cataluña, según cifras del Ministerio de Sanidad.
El último caso de violencia de género ha sido el de una mujer de 45 años apuñalada por su pareja, que posteriormente se suicidó el mediodía de este jueves en el domicilio que compartían en la calle Pedraforca de L'Hospitalet.