Así lo han comunicado, en declaraciones que recogen hoy los medios de comunicación de Italia, los familiares de Vincenzo Montella y Giovanni Vollaro, dos de los diez retenidos italianos -dieciséis en total- con los que sus allegados pudieron hablar ayer.
Sin embargo, en un comunicado de prensa divulgado poco después de conocerse esta noticia, el Ministerio de Asuntos Exteriores italiano precisa que ni el armador de la nave ni la Embajada de Italia en Somalia han comunicado que los secuestradores se hayan expresado "en esos términos" y que, por tanto, haya ningún ultimátum.
Según los familiares, Montella y Vollaro telefonearon el jueves por la tarde y hablaron con sus padres, a los que dijeron que los secuestradores les han dado un ultimátum de 72 horas a partir de hoy para iniciar una negociación por su liberación.
En caso contrario, aseguran las familias de los dos secuestrados, procederán a matar a los 16 marineros.
Los familiares de los dos italianos piden al Gobierno y a su primer ministro, Silvio Berlusconi, "que den todos los pasos posibles" para conseguir la liberación de los secuestrados.
El barco secuestrado, que se dirigía desde Singapur hasta el canal de Suez, pertenece a la empresa Micoperi, de Rávena (costa adriática italiana) y fue asaltado a 60 millas del Golfo de Adén, entre Somalia y Yemen.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Italia ha pedido discreción en el asunto a los medios de comunicación y, hasta el momento, ha ofrecido pocos detalles sobre el estado actual del secuestro.
El miércoles, el titular de Exteriores, Franco Frattini, dio cuentas del asunto en la Cámara de los Diputados italiana y explicó que su Gobierno está en contacto con las autoridades de Somalia, que se han ofrecido para abrir "canales de comunicación" con los secuestradores.