Antonio del Castillo ha recibido una llamada telefónica desde el gabinete del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, informándole de la fecha en la que el jefe del Ejecutivo le recibirá en el Palacio de la Moncloa el próximo martes. Esta llamada se produce tras la petición de los propios progenitores de la víctima. "El presidente nos va a recibir". Hasta el momento, la familia no ha resuelto todavía los pormenores del viaje y la cita, cómo quienes se sentarán con Zapatero.
Se agotan los medios que poner al servicio de la búsqueda de la joven. Medios humanos y materiales, el último un detector de metales con que se trata de encontrar dos de los elementos importantes en el juicio: el arma empleada, un cenicero, según la declaración del autor confeso del crimen, Miguel Carcaño, y el cuerpo de Marta. La joven podría llevar objetos metálicos encima en el momento del crimen. Las fuentes han indicado que se ha intensificado en el tramo del río Guadalquivir que transcurre bajo el puente de Camas, a la altura del Charco de la Pava, donde los detenidos afirmaron haber arrojado el cuerpo de Marta del Castillo la noche del pasado 24 de enero.
Son elementos importantes para dar cuerpo a la acusación, para elevarla a homicidio o a asesinato (esta última la más grave), según si la joven estaba o no muerta en el momento en que fue arrojada al río. Importantes pero no imprescindibles para pedir una condena de muchos años de cárcel para los principales imputados, Miguel Carcaño, autor confeso, y su supuesto cómplice, Samuel Benínez, que se ha declarado inocente en contra de su primera declaración ante la Policía.
Prisión provisional para el hermanastro
El juzgado de Instrucción número 4 de Sevilla ha decretado el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza para Javier D., hermano del autor confeso del crimen de Marta del Castillo, por su presunta relación con la desaparición y muerte de la menor.
Tras aproximadamente cuatro horas prestando declaración, el juez ha acordado enviar a la cárcel al sospechoso después de que la Fiscalía solicitara prisión para Javier D. por un presunto delito de asesinato con alternativa de homicidio o, en su defecto, detención ilegal sin dar razón de su paradero. El detenido, que negó la autoría de los hechos que se le imputan, salió de las dependencias judiciales en torno a las 16,20 horas con destino a la cárcel.
El hermanastro del presunto autor del asesinato está acusado de encubrimiento o complicidad en el crimen, aunque fuentes judiciales han indicado que previsiblemente su abogado alegará que el encubrimiento entre parientes es impune.
El menor los inculpa
Según publica el diario El Mundo, el menor Javier G.M. ha implicado en su declaración a todos los demás acusados. El menor habría admitido que colaboró con el resto de los sospechosos pero sólo para trasladar el cadáver. Javier situó en el escenario del crimen, la casa del hermanastro de Miguel, a los otros tres imputados: el presunto asesino, su hermanastro, Javier Delgado, y su amigo Samuel.
El menor aportó muchos datos a la Policía sobre cómo se deshicieron del cadáver. Los policías le han enseñado los lugares donde encontraron sangre a pesar de que el piso había sido limpiado y han vuelto a repasar la casa con una luz forense que busca fluidos corporales y restos orgánicos.
La Policía podría haber encontrado ADN de Marta en las prendas que llevaban los imputados. Eso demostraría la relación directa de los cuatro en la muerte. Los cuatro estuvieron en el piso, es lo que cree la Policía, a pesar sus declaraciones contradictorias. Hoy podría hacerse algo más de luz con la declaración del hermanastro de Miguel que ya ha pasado a disposición judicial.
¿Amenazas de Miguel?
Medios locales han logrado un extracto de una de las conversaciones que el presunto asesino y Marta mantuvieron en la Red. El pasado agosto, Miguel habría amenazado a Marta con matarla por haber dejado una de sus camisetas a otro chico.
No parece que se tratase de una amenaza literal sino más bien de una forma de hablar y así se lo tomó la joven que en su respuesta le dijo "Jajaja... se siente". Y que se despedía con un "Te quiero".
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