Fortaleza:
- Tienes el corazón entrenado para hacer lo que se debe en cada momento. Sabrás dirigir sus pasos para que parezca que ha sido idea suya regalarte rosas, de sorpresa, por San Valentín.
Debilidad:
- Ten cuidado. Asegúrate. No vayas a empezar a cabalgar por la orilla y tu enamorado esté mirando a otra que corre detrás de ti.
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