Kiko Rivera y Jessica Bueno se encontraron en los juzgados donde se solicitaban medidas provisionales en lo que se refiere a la custodia de su hijo Francisco. Finalmente, Kiko Rivera anunciaba que la jueza había dictado que la custodia fuera compartida y Kiko Matamoros apuntaba que, en la vista, se vivió “un auténtico drama” y narraba que Jessica “se puso de rodillas llorando a lágrima viva”.
24 horas después, veíamos las primeras imágenes de Jessica Bueno tras la noticia. Aparecía seria, silenciosa y, en todo momento, acompañada por sus familiares.
Kiko Hernández explicaba lo que piensa ahora la modelo: “Esta chica, los lamentos, lo lloros y toda la historia es porque no acepta aunque se lo haya dicho una jueza”, comenzaba a decir, “no acepta que el niño pase ni una sola noche con Kiko Rivera”.
El colaborador apuntaba que Jessica Bueno se había planteado romper su silencio con algún tipo de entrevista pero Terelu Campos recibía un mensaje y citaba las palabras textuales de la modelo: “Jessica Bueno dice ‘no quiero tener nada que ver con ese circo en referencia a exclusivas. No, no voy a hablar de nada”.