Saludando y moviendo sus brazos frente al mar al atardecer. Así comenzaba el fin de sema Paz Padilla, disfrutando de las vistas y de la playa, uno de sus lugares favoritos.
Cualquiera querríamos ser el protagonista de esta imagen. Sentados en una roca, con los pies en el agua y disfrutando de los rayos de sol. Así está Paz Padilla, mirando al cielo y apoyada sobre las rocas. “¡La vida me sonríe!”, exclamaba.
Tras el baño, tocaba descansar y lo hacía disfrutando de "dos grandes placeres": Leyendo un libro mientras tomaba el sol plácidamente tumbada. En conclusión, un “weekend fantástico” para recargar las pilas antes de volver al trabajo.