Morón: Espero que me tenga bien preparadita la jugadita.
Jessica: Me ofendes Moroncito. Mira, Mariana, aún está en el insti. Quiere ser modelo y necesita que alguien le de un empujoncito a su carrera, y yo le he dicho que conozco a la persona indicada para hacerlo.
M: Esta pendeja cómo sabe lo que a mi me gusta. Pero me estoy haciendo mayorcito.
J: No.
M: Estoy buscando algo más tranquilo.
J: Bueno, pues te busco una más madurita.
M: Yo a quien quiero es a usted Jessica.
J: Bueno, ya hace mucho que no me acuesto con mis clientes.
M: Esta vida es una huevonada, siempre de un lado para otro, y solo. Yo no soy de casamiento ni maricadas de esas, pero quiero encontrarme la camita caliente cuando llegue a casa.
J: Ya, pero es que yo no soy la estufa de nadie.
M: Se nos va a picar de durita la pecosita. Si usted está igual de sola que yo, dígame que no le gustaría tener a alguien a quien abrazar cada vez que se siente de bajón. ¿Se da cuenta? No tiene nada mejor que yo. Usted déme cariñito, pídame lo que quiera, no hay nada que Morón no pueda conseguir mi amor.
J: ¿Y Rafa? Tengo que hablar con él por unos pedidos, y se me están retrasando.
M: Tómese todo el tiempo que quiera, no importa. Y el Duque está solucionando unos asunticos para mí, estamos a punto de hacer un gran negocio, pero antes tenemos que mandar a comer mierda a unos hijos de puta sapos.
M: ¿Qué le pasa a esa carita tan linda llena de pequitas?
J: Nada, que estoy pensando en lo que me dijiste antes, y ¿por qué no me esperas y te preparo algo especial?
M: ¿Y dónde quiere que la espere mi amor?
J: ¿Qué te parece en la esquinita del amor?
M: Yo voy donde usted me mande mi amorcito, pero no se me vaya a demorar, ¿oyó?
J: No, lo justito.