Tras ver un vídeo en el que su marido aparece junto a su hermano y otros jóvenes armados, Fátima no puede controlar las lágrimas. Sabe que su marido no es el buen hombre que ella creía, pero se niega a darle la razón a Morey.
Tras ver un vídeo en el que su marido aparece junto a su hermano y otros jóvenes armados, Fátima no puede controlar las lágrimas. Sabe que su marido no es el buen hombre que ella creía, pero se niega a darle la razón a Morey.