Jessica no quiere pronunciarse ni hablar del padre de su hijo. Cuatro días después de la entrevista de Kiko Rivera en el 'Deluxe', en la que la acusó de no dejarle ejercer como padre, Jessica continúa con su tranquila vida en Eibar. La modelo no ha cambiado sus rutinas y cada día se deja ver pasear junto a su novio, el futbolista Jota Peleteiro, y su hijo por las calles de la ciudad, donde ya se ha ganado el cariño de sus nuevos vecinos.
La modelo no responde a las preguntas de los reporteros. Jessica lo ha dejado todo en manos de sus abogados y prefiere no seguir alimentando esta guerra que estalló el día que le comunicó a Kiko que se trasladaba a Eibar.
¿Actúa Kiko por venganza?
Jessica mantiene una actitud prudente ante la prensa aunque en su familia ya se especula sobre los verdaderos motivos que han llevado a Kiko a dar esta entrevista y a luchar por la custodia de su hijo. Según ha revelado el periodista Antonio Rossi, el entorno de Jessica cree que Kiko actúa por venganza y que sólo quiere que la modelo vuelva a Sevilla.
Según el entorno más cercano, desde que la pareja se separara, Kiko nunca estuvo interesado en la custodia compartida y mucho menos en la total. El hijo de Isabel Pantoja se conformaba con ver a su hijo un fin de semana cada 15 días y por eso creen que detrás de la actitud de Kiko hay un deseo de obligar a la madre de volver a Sevilla y fastidiarle su relación con Peleteiro.